Si sufres de problemas urinarios, como incontinencia, dificultad para orinar o frecuencia urinaria, es posible que te sientas frustrado y limitado en tus actividades diarias. Sin embargo, la urología funcional puede ofrecerte soluciones efectivas para recuperar el control de tu sistema urinario.
Esta subespecialidad de la urología se enfoca en el estudio y tratamiento de los trastornos funcionales del tracto urinario, con el objetivo de mejorar la calidad de vida de los pacientes. En este artículo, te presentaremos información clave sobre la urología funcional, incluyendo los problemas urinarios que trata, los tratamientos disponibles y cómo pueden ayudarte a recuperar tu bienestar y calidad de vida.
¿Qué es la urología funcional?
La urología funcional es una subespecialidad de la urología que se enfoca en el estudio y tratamiento de los trastornos funcionales del tracto urinario, es decir, los problemas relacionados con la micción y la retención de orina. Aborda una amplia variedad de problemas urinarios, incluyendo la incontinencia urinaria, dificultad para orinar, retención de orina y el prolapso de órganos pélvicos.
Los especialistas en urología funcional tienen una formación especializada en la evaluación y tratamiento de estos trastornos. Estos pueden utilizar una variedad de herramientas diagnósticas, como estudios urodinámicos, para evaluar el funcionamiento del tracto urinario.
Tratamientos quirúrgicos que se utilizan en la urología funcional
Los tratamientos quirúrgicos son una opción efectiva para tratar problemas urinarios que no han respondido a otros tratamientos o para corregir problemas estructurales del tracto urinario. En la urología funcional, se utilizan varios tratamientos quirúrgicos para mejorar la calidad de vida de los pacientes y restaurar la función normal del tracto urinario. A continuación te diremos cuáles son esos tratamientos y te explicaremos de forma breve de qué se tratan.
Sling uretral
Esta técnica fue desarrollada en la década de 1990 y consiste en la inserción de una cinta debajo de la uretra para dar soporte a la misma y prevenir la incontinencia urinaria de esfuerzo. El sling uretral es una técnica mínimamente invasiva que se realiza a través de pequeñas incisiones en la pelvis. Es un tratamiento efectivo para la incontinencia urinaria de esfuerzo y puede ser utilizado en pacientes de ambos sexos.
Colocación de esfínter urinario artificial
Surge de la década de 1970, consiste en la colocación de un dispositivo en forma de anillo alrededor de la uretra para controlar la micción. El esfínter urinario artificial se infla y desinfla mediante un dispositivo externo, lo que permite que el paciente pueda controlar la micción. En la urología funcional esta técnica se utiliza principalmente en pacientes con incontinencia urinaria de esfuerzo y funciona bien en hombres y mujeres.
Cirugía de prolapso de órganos pélvicos
Esta cirugía se utiliza para corregir el desplazamiento de los órganos pélvicos, como la vejiga, el útero o el recto, los cuales pueden desplazarse debido a la debilidad de los músculos pélvicos. La cirugía de prolapso de órganos pélvicos se realiza a través de una incisión en la vagina o el abdomen y puede requerir la colocación de una malla para dar soporte a los órganos. Se utiliza para restaurar la función normal del tracto urinario en pacientes con prolapso.
Cirugía de estenosis uretral
Es otra de las técnicas quirúrgicas en la urología funcional que se emplea para corregir la estrechez de la uretra, la cual causa dificultad para orinar. La cirugía de estenosis uretral se realiza a través de una incisión en la uretra y puede implicar la eliminación de tejido cicatricial o la colocación de una malla para ensanchar la uretra. Esta cirugía se usa para mejorar el flujo urinario en pacientes con estenosis uretral.
Resección del cuello vesical
Por último, otra de las técnicas que más se utilizan en la urología funcional; se lleva a cabo para corregir el flujo urinario deficiente al extirpar una porción del cuello de la vejiga. La resección del cuello vesical se realiza a través de una incisión en la uretra y puede requerir la colocación de una sonda urinaria temporal después de la cirugía. Se utiliza para tratar afecciones como la obstrucción de la salida de la vejiga, así como mejorar el flujo urinario.
Tratamientos no quirúrgicos en la urología funcional
La urología funcional se enfoca en tratar los trastornos urinarios y de la vejiga que afectan la calidad de vida de los pacientes. Los tratamientos no quirúrgicos son otra opción efectiva para corregir estos trastornos. Estos son menos invasivos que los tratamientos quirúrgicos y se pueden realizar de forma ambulatoria o en la consulta del médico.
Terapia del comportamiento
La terapia del comportamiento para trastornos urinarios hace referencia a los ejercicios del músculo del suelo pélvico, técnicas de relajación, cambios en el estilo de vida y programas de entrenamiento de la vejiga. Esta terapia se utiliza principalmente para tratar la incontinencia urinaria, la frecuencia y urgencia urinarias y otros trastornos urológicos.
Suele ser efectiva en mejorar la función urinaria y la calidad de vida de los pacientes. Es una de las primeras opciones de terapia no invasiva con pocos efectos secundarios dentro de la urología funcional.
Medicamentos
Los medicamentos se utilizan comúnmente para tratar la incontinencia urinaria, la frecuencia y urgencia urinaria y otros trastornos urinarios. Los anticolinérgicos, inhibidores de la reabsorción de serotonina y norepinefrina y agonistas beta-3 adrenérgicos son algunos de los medicamentos utilizados en la urología funcional. Los medicamentos pueden ser efectivos para mejorar la función urinaria, pero pueden tener efectos secundarios y no son adecuados para todos los pacientes.
Estimulación eléctrica
La estimulación eléctrica se utiliza para estimular los músculos del suelo pélvico y mejorar la función urinaria en pacientes con incontinencia urinaria y otros trastornos. La estimulación eléctrica se realiza a través de electrodos colocados en la piel, vagina o recto. Este tratamiento es no invasivo en la urología funcional, es indoloro y puede ser efectivo en mejorar la función urinaria tanto de hombres como mujeres.
Inyecciones de bótox
Las inyecciones de bótox también son utilizadas en la urología funcional, pero en este caso para corregir la incontinencia urinaria de urgencia y la frecuencia urinaria. El bótox es inyectado en la vejiga, lo cual relaja los músculos de la misma, reduciendo así la frecuencia y urgencia urinarias. Este tratamiento suele ser bastante efectivo, pero tiene efectos secundarios, como la retención urinaria.
Dispositivos de soporte
Los dispositivos de soporte, como los pesarios, se utilizan para ayudar a mantener los órganos pélvicos en su lugar y mejorar la función urinaria en pacientes con prolapso. El dispositivo se coloca en la vagina y da soporte a la vejiga o el útero. Este tratamiento puede ser efectivo, pero puede tener efectos secundarios, como la irritación vaginal.
La urología funcional aplica una gran cantidad de terapias o tratamientos tanto quirúrgicos como no invasivos. Cada uno de estos son efectivos para tratar una gran cantidad de problemas urológicos de manera efectiva. Si deseas conocer más sobre esta especialidad médica y otras áreas de la medicina como la ginecología, nefrología, dermatología y más, en nuestro blog encontrarás toda la información necesaria.
https://www.venegassalud.com/urologia-funcional-suelo-pelvico/
Blink: Telegra.ph
Blink: Blogger.com
